El día de la madre siempre es un día especial para todos. Los más peques siempre vienen del cole con manualidades y regalitos para cada una de estas superheroínas que les esperan en casa. Este año, aunque no haya manualidades escolares estoy segura de que las sorpresas y sonrisas no faltarán. Por ello, quiero compartir una receta fácil e irresistible para alegrarles de la manera más dulce su día y que los más peques también se pongan manos a la masa, ¿estáis listos? 

Las galletas Oreo son las preferidas por muchos, lo sé, ese sabor a vainilla junto con el crujiente de su galleta… ¡Normal que se nos haga la boca agua al pensar en ellas! Por eso quiero compartir con vosotros su versión clásica, para que las hagáis en casa con los mejores ingredientes y celebréis el Día de la Madre de la manera más dulce. Toma nota y… ¡Empecemos!

¿Qué vamos a necesitar?

Para la masa

  • 170 gr. de harina de trigo de repostería
  • 100 gr. de cacao en polvo
  • 80 gr. de azúcar moreno
  • 0,5 cc. de bicarbonato
  • 70 gr. de mantequilla atemperada

Para el relleno

  • 85 gr. de mantequilla en pomada
  • 90 gr. de azúcar glas
  • Extracto de vainilla
  • 15 ml. de leche
  • Una pizca de sal

¿Todo listo? Pues ahora si que si, ¡manos a la masa!

Empecemos con las galletas…

  • En primer lugar, tamizaremos mínimo dos veces la harina, el cacao, el bicarbonato y la sal. Y reservaremos en un bol.

 

  • En un bol echaremos el huevo, la mantequilla atemperada y el azúcar moreno, seguidamente moveremos muy bien con unas varillas. Esta tarea será mucho más sencilla y rápida si contamos en casa con un robot de cocina o varillas eléctricas. 

 

  • Una vez mezclados estos ingredientes, añadiremos al bol los ingredientes tamizados del paso 1. Nuestro objetivo es conseguir una masa homogénea y compacta sin grumos ni tropezones. 

 

masa galletas chocolate oreo

  • Con la masa bien mezclada, la pondremos sobre bandeja y le daremos forma rectangular. Acto seguido la envolveremos en papel film bien compacto y la meteremos en el frigorífico durante una hora aproximadamente. Por otro lado, encenderemos el horno a 180º C.

 

  • Dividiremos la masa en dos trozos iguales y la pondremos sobre papel de horno. Con la ayuda de un rodillo la estiraremos muy bien de manera uniforme hasta conseguir un grosor de aproximadamente de 3 milímetros. Espolvoreamos con cacao en polvo y la cortaremos con un molde circular.

 

  • Pondremos los círculos de las galletas sobre una bandeja con papel de horno y horneamos durante 8 minutos. Una vez pasados estos minutos, las sacaremos y las dejaremos reposar sobre una rejilla durante 15 minutos. 

Ahora vamos con el relleno…

  • En un bol batiremos con las varillas la mantequilla hasta que quede bien cremosa. Después, la mezclaremos con el azúcar glas y el extracto de vainilla.

 

  • Añadir la sal y la leche y seguir batiendo hasta conseguir una masa homogénea. Colocar una cucharadita del relleno en una galleta, otra galleta encima e ir repitiendo este paso hasta acabar con todos los círculos de masa. También se puede aplicar el relleno con una manga pastelera, a elección de cada uno. 

 

Recuerda guardar tus galletas en un recipiente hermético para conservarlas el mayor tiempo posible. No puedes olvidarte del último paso y el más importante, ¡Disfrutar cada uno de sus bocados y compartirlas con la reina de la casa! Estoy segura que le encantará la sorpresa y pasaréis un Día de la Madre de lo más dulce. ¡Buen provecho!